Nombrar un representante fiscal no es obligatorio en el Reino Unido.
Sin embargo, la obtención de un número de IVA intracomunitario en El Reino Unido requiere que se presente un dossier completo ante la administración fiscal alemana. Los trámites, se efectúan únicamente en inglés y pueden ser largos y complejos. Lo mismo ocurre con las declaraciones de IVA sometidas a normas propias de el Reino Unido y deben presentarse en inglés.
Con el fin de simplicar y agilizar el proceso de registro, y asegurarse que las declaraciones de IVA se declaran correctamente y en plazo, todas las empresas que estén o no establecidas en la UE, tienen la posibilidad de nombrar un representante fiscal en el Reino Unido.
Es importante subrayar que el representante fiscal no constituye un establecimiento permanente. Con lo cual, la representación fiscal constituye una alternativa sencilla y económica a la implantación física que sería una filial o sucursal.
De hecho, la representación fiscal permite a las empresas extranjeras entrar en el mercado británico y evitar así costes y obligaciones de Establecimiento físico lo cual implica entre otras cosas la creación de una estructura en el Reino Unido, la llevanza de una contabilidad distinta y impuestos sobre beneficios en el Reino Unido.
Gracias al representante fiscal qui se encarga de cumplir con las obligaciones de la empresa en materia de IVA en el Reino Unido, puede dirigirse la actividad desde el extranjero.